Sabías que...


  • Los ciervos son mamíferos ungulados “provistos de pezuñas o cascos” como los camellos, cerdos, hipopótamos…En este grupo también se encuentran otros animales que no cuentan con "pezuñas verdaderas" como es  el caso del elefante, ballena y el delfin.



Pezuña

  • Los ungulados son los herbívoros terrestres dominantes, se debe a su capacidad de correr más rápido y a mayor distancia que cualquier gran depredador.


  • El ciervo pertenece a la familia de los cérvidos, que comprende también el alce y el reno.


  • Su aparato digestivo es capaz de digerir la celulosa de las plantas, que son los componentes de las paredes celulares de las plantas, por medio de unos microorganismos, que otros animales no pueden digerir.


  • Los ciervos son rumiantes, regurgitan la comida fermentada que está en una parte del estómago llamada panza y la vuelven a masticarla una segunda vez. El proceso digestivo puede durar hasta 4 días y aprovecha al máximo los nutrientes.


  • Hay 27 subespecies de Cervus elaphus en todo el planeta, algunas consideradas invasoras.


  • Los ciervos que viven en países del norte son más grandes que los que viven en países mediterráneos como España.

  • En la Península Ibérica existe registro fósil de la presencia del género Cervus que se remonta hasta hace varios millones de años, y hay registros de la existencia de Cervus elaphus desde al menos el Pleistoceno superior (hace 120.000 años)

  • Se cree que el número total de ciervos en España sobrepasa los trescientos mil individuos.

  • El ciervo de vive en la Península Ibérica es la especie cervus bolivari se extiende casi por todo el territorio peninsular, con la excepción de la parte más occidental de Galicia y la costa levantina.

  • Hay otra especie de ciervo (Cervus elaphus hispanicus) que solo se puede encontrar en las Marismas del Guadalquivir

  • El ciervo es una especie cinegética, y ha sido desde siempre una pieza fundamental en la actividad venatoria humana. En las últimas temporadas se vienen cazando en España más de 60.000 ciervos al año, de ambos sexos. Es la pieza clave de la montería tradicional española, y muchos terrenos se organizan y se gestionan alrededor de este aprovechamiento.

  • Los machos pueden pesar entre 150-200 Kg y las hembras entre 75-125 Kg.

  • Los machos suelen vivir de 12 a 13 años y las hembras pueden llegar hasta los 20 años, porque ellos tienen más desgaste físico debido al crecimiento de las cuernas

  • La cornamenta de los ciervos se llama “cuerna” porque todos los años las pierden y las vuelven a generar. Pero hay otros animales con “cuernos”, que los mantienen toda su vida, y cada año crece un poco más, como la cabra montesa y el muflón.

  • Estudiando las cuernas de los ciervos no se puede saber su edad, solo se podría saber estudiando el desgate dentario


Partes de la cuerna del ciervo

  • En los ojos tienen un pequeño surco en la parte lacrimal, que en la época del celo, van a emitir una sustancia (huele muy mal), para marcar el territorio


  • Los tres primeros meses de edad los ciervos tienen el pelo rojo con motas blancas, para camuflarse mejor. De adultos tienen dos coloraciones, dependiendo de la época del año, en primavera-verano son rojizos y en otoño-invierno son pardos.


  • La parte trasera de los ciervos se llama el espejo, que es un penacho de pelos que rodea al ano, en los ciervos es de color claro. Lo utilizan para comunicarse entre ciervos y con sus crías. Dependiendo de cómo muevan la cola, comunican el peligro.
  

  • Un ciervo macho el primer año de su vida ya desarrollan cuernas, echan dos varas, a estos se les denominará varetos, algunos ese primer año pueden presentar alguna punta y se les llama horquillones; en el tercer año ya aparece un desarrollo normal de las cuernas.


  •  Las hembras de ciervo no tienen cuernas pero puede aparecer alguna anomalía y desarrollar algún  cuerno, pero no es lo normal.






  • El crecimiento de las cuernas de los ciervos machos dependerá del estado fisiológico del animal, de la disposición alimenticia y del clima. Un año lluvioso asegura mejores cuernas que un año de sequia.


  • Las cuernas de los ciervos machos se caen entre febrero-marzo y esa época se llama desmogue. Se les queda un muñón que es donde crecerá la nueva cuerna.


  • Las cuernas del ciervo son como un hueso macizo. Están formadas por calcio, cuando se les caen ellos a veces las muerden para conseguir algo de calcio para las siguientes cuernas. Otros animales como roedores también se las comen.


  • La cuerna tarda en crecer 4 meses de marzo a julio.


  • Estos meses de crecimiento de la cuerna la tienen recubierta de una especie de terciopelo que tiene circulación sanguínea, cuando esta cuerna se desarrolla del todo el terciopelo (correal) se cae en forma de jirones, este se cae con ayuda del animal que se restriega en las matas (ya que cuando se les cae les pica y les escuece – escoda-).


  • El terciopelo de la cuerna también se llama «borra» y es consumida por pequeños carnívoros distribuidos por el hábitat del ciervo ya que posee gran cantidad de minerales y otras sustancias alimenticias, especialmente en los extremos de la cuerna.


  • Las cuernas de un ciervo de 3 años pueden llegar a pesar 2 Kg, entre los 6-11 años puede llagar a pesar 14 Kg.


  • A partir de los 11 años a los ciervos se les produce una regresión fisiológica; por eso los mejores trofeos (las cuernas más desarrolladas) aparecen entre los 6-11 años de vida en el animal.


  • En el ciervo adulto, pueden distinguirse de abajo arriba los siguientes tipos de puntas, (aunque no todas están presentes en todos los ejemplares): dos pares de luchaderas, un par de puntas centrales, y un número muy variable de puntas en la parte superior llamada corona.


  • La época de celo del ciervo se llama berrea y empieza entre septiembre y octubre. Puede durar un mes. El macho se muestra en extremo egoísta: no piensa más que en su apetencia sexual, olvidándose incluso de comer, por lo que puede perder muchos kilos, entregándose a duros combates con otros machos contendientes, en defensa de su harén o territorio, tratando en algunos momentos a las hembras con violencia. Como el macho dominante no tiene tiempo de comer, pierde tantos kilos que la mayoría no sobreviven durante el siguiente invierno.


  • Los rivales machos que compiten por un harén de hembras tienen un ritual, caminan en paralelo, traban la cornamenta y forcejean hasta que uno es rechazado y huye.


  • La tasa de berridos por unidad de tiempo que emite un macho durante la berrea está relacionada con su capacidad de ganar en una pelea, por lo que puede ser utilizada por los rivales para decidir retar o no a un oponente.


  • El tamaño relativo de las cuernas y su complejidad se asocia con el tamaño relativo testicular y la velocidad de los espermatozoides. Por tanto, las cuernas de los machos pueden indicar no sólo su capacidad de lucha sino también su fertilidad. A partir de este dato constatado, los científicos del CSIC proponen que esta información sobre la fertilidad de los machos podría ser percibida de algún modo por las hembras, y utilizada además para elegir con qué macho aparearse, desmarcándose así de la hipótesis tradicional de que sólo los ejemplares que vencen en las peleas logran el apareamiento con las hembras.


  • El parto de un ciervo es entre mayo y julio y dura solo 10 minutos


  • Los ciervos tienen normalmente una sola cría pero hay veces que una hembra amamanta y adopta el cervatillo de otra hembra, o abandonados.


  •  Durante el primer año de vida de la cría y parte del segundo, hasta que la madre no entra en un nuevo celo la cría acompaña a la madre. Posteriormente las hembras suelen mantenerse en el mismo territorio que la madre, mientras que los machos jóvenes se desplazan en busca de nuevos territorios, efectuando desplazamientos en torno a los 20 Km.


  • Desde los 2 años en adelante y prácticamente hasta su muerte, las hembras de ciervo pueden producir una cría cada año, que puede sobrevivir o no.


  • La mortalidad es mayor en crías macho que en crías hembra.


  • Los machos de ciervo más fértiles producen más hijos que hijas.


  • Durante las primeras semanas de vida, los cervatillos son extraordinariamente vulnerables frente a los depredadores. No disponen de la fuerza y velocidad para escapar a la carrera. Para evitar peligros, las madres lamen cuidadosamente la piel de sus crías para eliminar su olor y los dejan agazapados en la hierba, completamente inmóviles mientras ellas tratan de distraer a los depredadores. Los lunares les ayudan a difuminar su figura entre las hierbas. Su camuflaje es perfecto.


  • El ciervo es más activo durante el amanecer y atardecer, siendo su periodo de menos actividad el centro del día y la medianoche. Es una especie marcadamente errática, de forma que raramente pasa más de un día en un mismo lugar, sin molestarse nunca en preparar un encame.


  • El macho suele vivir en solitario, mientras que las hembras, junto con los ejemplares más jóvenes, se organizan en rebaños que pueden ir desde 3 ó 4 ejemplares a más de 20, normalmente dirigidos por una hembra experimentada, que coordina el rebaño manteniendo una rígida jerarquía en la que participan tan solo las hembras más adultas. Este rebaño matriarcal posee un territorio de verano y otro de invierno y ambos son defendidos de la intrusión de otros grupos.


  • Los ciervos requieren unas amplias zonas de territorio con una alternancia de zona de pasto, de bosque, de bosque de frutos y agua. También necesitan la ingestión de sal para el desarrollo de las cuernas.


  • En la Península Ibérica el ciervo es una especie presa del lobo en ciertos lugares donde las poblaciones de lobos son abundantes y coexisten con cierta densidad de ciervos, como por ejemplo en la Sierra de la Culebra (Zamora).


  • Las crías de ciervo pueden ser esporádicamente depredadas por el lince cuando no existen otras presas más adecuadas


  • Los ciervos son herbívoros muy voraces y pueden llegar a ser una plaga y amenazar la población de ciertas plantas.


  • Los ciervos poseen orejas móviles, una aguda visión binocular y un fino sentido del olfato para detectar el peligro.


La primavera en el parque de El Hosquillo:

Durante la primavera se produce una acontecimiento muy interesante, es el llamado desmogue del ciervo. Los machos pierden su cornamenta para sustituirla por una más grande y puntiaguda. 

En los meses de marzo y abril podemos encontrar en el parque cinegético de El Hosquillo restos de cornamentas que anteriormente cubrían la cabeza del ciervo. Durante un tiempo se sienten avergonzados por su perdida, son un rey sin su corona.

Estudios han demostrado que tanto el crecimiento como la pérdida de la cornamenta están ligados al ciclo de la actividad hormonal sexual.

Desmogue

El otoño en el parque de El Hosquillo:

La berrea es el espectáculo que nos ofrece el ciervo rojo en su época de celo (el otoño). Se considera el mejor concierto de la naturaleza. Durante el amanecer y el atardecer se puede escuchar en el parque cinegético de El Hosquillo (Cuenca) los espeluznantes bramidos de los machos.

Las hembras observan indiferentes este acontecimiento mientras ellos combaten por conseguir sus favores. Chocan sus enormes cornamentas puntiagudas, y solo el vencedor obtendrá el derecho de quedarse con su amada.


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